RETORNO
 
Porque busqué su olor
entre las piedras
    cubierta de veranos amarillos
Parménides me rescató
de la quietud del agua.
 
Me ató al vaivén del mar
con ese alambre
    donde colgaba irónica 
    la mueca del destino.
 
Fui lluvia
    fui desierto en las manos
la mancha de humedad
    en los ojos desnudos
 

Alguien cantó por mi
bajo los sauces.

        Madrigueras resguardan
        pedazos del espejo.
 
Amanece...
el agua me despeina los bordes
de aquel rastro
convertido en ayer.
 

© Silsh
(Silvia Spinazzola)
-Argentina-

   
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